Cubaencuentro
Mientras en varios sitios del mundo democrático se rememoraba la infausta fecha del 18 de marzo, conocida como la Primavera Negra de Cuba, el gobierno de la Isla volvía a arremeter con saña contra los opositores pacíficos.

Encarcelamientos, detenciones arbitrarias, restricciones de movimientos, golpizas y actos de repudio fueron otra vez la respuesta de Raúl Castro para demostrar al mundo la inamovilidad del sistema socialista criollo.

Cuando al filo del mediodía del 16 de marzo el Tribunal Popular de Guantánamo dictó sentencia de seis años contra el preso político Abel López Pérez, comenzaba la sarta de infamias que se sucederían durante toda la semana. López Pérez fue acusado de ‘atentado’ contra un oficial que lo empujó hacia un carro en movimiento, por lo que hoy guarda secuelas, como fracturas en la clavícula y vértebras fuera de lugar.

‘Estando preso en el Combinado de Guantánamo’, dijo Abel esa mañana, ‘una jueza intentó acusarme de suicidio, que ya es el colmo de la desmoralización’.

Al entrar al tribunal fueron detenidos los activistas del Movimiento Jóvenes por la Democracia (MCJD) Niover García Fournier, Mariano Fernández y otros más.

López Pérez fue llevado directamente hasta la mencionada prisión, desde donde informó a la directiva del Movimiento Resurrección Martiana (organización que dirige) que se encuentra en huelga de hambre.

El día 17 de marzo, la policía política de Holguín interceptó en las inmediaciones de Buenaventura a la periodista independiente Caridad Caballero Batista.

‘Me hicieron bajar allí mismo, pero tuvieron que bajarme, les grité mil consignas no violentas y tuvieron que arrastrarme mientras les daba el show al que tanto le temen’, aseguró la comunicadora.

Caballero Batista se dirigía hacia La Habana para apoyar a las Damas de Blanco. Según informó a este diario, inmediatamente fue llevada hacia una habitación climatizada a baja temperatura. Allí permaneció por varias horas. Casi una semana después, todavía padece una fuerte afección respiratoria.

Nosotros (ustedes), el pueblo
Los ojos del ‘sistema de vigilancia popular’, combinados con los órganos represivos, se volvieron sobre los disidentes pacíficos víspera del 18 de marzo.

Reportes desde varios lugares de la región oriental dieron cuenta de un operativo desproporcionado para que los disidentes no participaran en actividades fuera de sus residencias.

En San Germán, Holguín, este redactor y José Triguero Mulet se vieron impedidos de viajar hacia la capital provincial. El operativo lo monitoreó el oficial retirado, ahora al servicio de la Seguridad del Estado, Luis Pérez Pérez (ver foto a la derecha). Durante dos días, coordinadores de los CDR y otras personas de civil vigilaron las residencias. Los incidentes de este tipo se informaron igualmente desde Moa y Antilla, contra los opositores José Herrera Hernández y Kristian Toranzo Fundichelys, así como en Banes y Sagua de Tánamo.

En Palma Soriano, Raudal Ávila fue citado al cuartel general de la Seguridad en Santiago de Cuba, donde fue amenazado por un oficial que dijo ser ‘segundo jefe de enfrentamiento al enemigo interno’.

En la ciudad de Holguín, las casas de Esteban Sande Reyes y José Ramón Pupo Nieves, ubicadas a doscientos metros de la Unidad Provincial de Patrullas, permanecieron fuertemente vigiladas por fuerzas militares.

El mismo 18, el Tribunal Municipal de Baracoa dictó la sentencia de dos años por el delito de ‘resistencia’ contra el opositor pacífico Alejandro Jiménez Blanco, del Movimiento Cubano de Jóvenes por la Democracia. Antes de permitir la entrada de familiares al recinto, la policía política detuvo al opositor Rolando Rodríguez Lobaina. Lo mantuvieron encerrado hasta el día siguiente, para que no asistiera al juicio o llevara a cabo alguna forma de protesta.

Por su parte, en el centro del país, la casa de Jorge Luis García Pérez (Antúnez) permanecía acordonada en sus bocacalles correspondientes.

‘Para pasar, hay que hacerlo por una barrera policial que sólo le da el acceso a los que residen en la cuadra, de lo contrario son obligados a hacerlo por otra vía’, comentó una fuente del lugar.

Guillermo Fariñas Hernández, Donaida Pérez Paseiro y Alcides Rivera Rodríguez fueron detenidos mientras se dirigían a la casa de Antúnez, y liberados al día siguiente; también fue detenida —y liberada más tarde— la activista Idania Yanes Contreras, presidenta de la Coalición Central Opositora, quien se encuentra en su séptima semana de embarazo y ha iniciado una huelga de hambre.

Varios medios internacionales cubrieron el acto de repudio que organizó la Seguridad del Estado contra las Damas de Blanco frente al Tribunal Supremo en La Habana, el día 19. Mientras los partidarios del gobierno lanzaban improperios contra las pacíficas mujeres, ‘uno de los repudiantes comentó: ´recuerda que nos dijeron que no podíamos golpearlas´’, relató vía telefónica Ana Belkis Ferrer, hermana de Luis Enrique y José Daniel Ferrer García, encarcelados con 25 y 28 años.

Enlaces: Solidaridad Española con Cuba

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Autor: Cubaencuentro/SEC