Diario Montañés
‘Viva Cuba socialista’. ‘Abajo la ´gusanera´’. ‘Viva Fidel’. ‘Fuera de esta tierra’… Son algunos de los gritos que despertaron en Nochevieja al disidente cubano Héctor Raúl Valle Hernández y su familia mientras dormían en el centro de acogida de Cruz Roja en Torrelavega, donde residen desde el pasado 15 de noviembre.

Todo un ‘acto de repudio’, al modo del oficialismo castrista, que un reducido grupo de personas de la izquierda radical le dedicó al primer disidente cubano en Cantabria, quien no entró en la provocación. ‘No me asomé para evitar problemas y porque yo soy un luchador pacífico por la libertad de mi Cuba’, afirrmó ayer Héctor Rául, tras confirmar los insultos y amenazas que recibió de madrugada.

Pintadas
Aunque es la primera vez que se enfrentaba a una situación semejante, Héctor Raúl recordó que ha recibido otras provocaciones desde que llegó a Cantabria. Dos días después de ingresar en el centro de acogida de Torrelavega, se encontró en la propia fachada lateral del edificio de Cruz Roja una pintada con el lema ‘Viva Cuba socialista’, que aún permanece. El disidente cubano, que reconoce que su familia está ‘un poco aterrada» con esta situación, cree que estos actos no son hechos aislados y que todo está organizado por el Gobierno de los hermanos Castro. ‘No hay otro culpable’, dijo tras recordar las persecuciones que sufren otros disidentes cubanos también en España, ‘a los que les ha pasado algo parecido’. También recordó que entre las personas que le insultaron en Torrelavega las había con acento cubano.

No obstante, quiso dejar claro el apoyo que está recibiendo de parte de otra mucha gente. ‘Cuando salí en la primera plana de este periódico, algunos españoles se acercaron a mí y han sido solidarios conmigo y mi familia’. Agradeció el apoyo que ayer le brindó Unión, Progreso y Democracia (UPyD). El partido de Rosa Díez solicitó a las autoridades españolas protección para él y su familia ‘para que no vuelvan a sentirse amedrentados por grupúsculos caracterizados por su sectarismo y su falta de respeto a los derechos humanos y a la propia democracia española’.

El disidente cubano hizo extensible su agradecimiento a ‘mis hermanos de causa que están viviendo en libertad aquí en España’. Por último, mandó un mensaje a los que le insultan y amenazan: ‘No me rendiré. Una gritería barata no va a hacer que deje de luchar por mi país. Ahora con más fuerza voy a seguir luchando por la libertad y a seguir echando un granito de arena a esta escalera que estamos construyendo hacia la democracia’.

Héctor Raúl Valle, vicepresidente de la Confederación Nacional de Trabajadores Democráticos, fue uno de los presos políticos que el régimen cubano liberó el año pasado gracias a la mediación del Gobierno español y la Iglesia Católica. Este disidente fue detenido en 2003, durante la llamada ´Primavera Negra´. Tras su excarcelación llegó a España el 24 de septiembre y desde el 15 de noviembre reside en Torrelavega. Entre sus planes más próximos está el ‘salir lo más rápido posible’ del centro de acogida de Cruz Roja. ‘Si de mi dependiera estaría en un piso con mi familia’, concluyó.

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Autor: Diario Montañés