Las autoridades de Cuba advirtieron a los diputados Dr. Mátyás Eörsi, Profesor Eric Jurgens y Dr. Andres Kerkel, el 4 de agosto, que podrían ser expulsados del país si continuaban conversando con representantes de la oposición, aduciendo que no lo pueden hablar con “la gente”, pues están en calidad de turistas. Entonces, detuvieron al Sr. Gábor Beszterczey y su hija Dóra, quienes los ayudaban en la traducción, y los deportaron en la tarde del 5 de agosto.

Los diputados de Hungría, Países Bajos y Estonia, miembros de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, llegaron a La Habana el 31 de agosto y tenían previsto permanecer en Cuba hasta el 7 de septiembre. Durante su estancia, se han entrevistado con las Damas de Blanco y destacados disidentes cubanos.

En la mañana del 5 de agosto acudieron a misa en la Iglesia Santa Rita de Casia y se solidarizaron con las Damas de Blanco y sus familiares llevados a prisión durante la Primavera Negra del 2003, así como con los demás presos de conciencia y políticos. Como cada domingo, mujeres vestidas de blanco acudieron desde todas las provincias para asistir al servicio religioso y luego caminar por la 5ta Avenida de Miramar.

Las Damas de Blanco expresaron su gratitud por el valiente apoyo de los diputados europeos, al tiempo que lamentaron que estuvieran sometidos también a la represión del gobierno de Cuba. Se mostraron muy sensibilizadas por la injusta detención a los ciudadanos húngaros Berszterczey y muy particularmente por los daños psicológicos a la joven Dóra.

En la mañana del 6 de agosto se supo que los diputados no han sido todavía deportados.

Autor: Miriam Leiva