Maritza Castro e Ivonne Mayesa fueron conducidas desde sus hogares al Departamento Técnico de Investigación (DTI) hacia la cuarta unidad policial del municipio capitalino del Cerro donde permanecieron por más de 3 horas bajo fuertes interrogatorios oficiados por agentes del Departamento de la Seguridad del Estado (DSE) de la sección 21.

Según Castro la detención se debió a que varias esposas y otros familiares de los prisioneros políticos cubanos acudieron al Hospital Militar ‘Carlos J. Finlay’, en La Habana, en la noche del miércoles 18 de febrero para expresar su solidaridad con el opositor Ariel Sigler Amaya, quien lleva cinco meses ingresado y fueron sacadas por la fuerza del lugar por varios agentes de Seguridad del Estado.

Maritza e Ivonne fueron algunas de las Damas de Blanco que acompañaban Noelia Pdraza, esposa de Sigler Amaya, quien había decidido permanecer frente al hospital reclamando la entrega del diagnóstico del activista preso y fueron subidas por la fuerza a una guagua (autobús) y recibieron golpes y empujones de las fuerzas represivas que luego las condujeron a sus casas.

Las detenidas fueron cuestionadas en los interrogatorios por no tener a familiares presos y trataron de apenarlas profiriéndole ofensas.

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Autor: Cubamatinal/SEC