El Nuevo Herald
El ex preso político Ariel Sigler Amaya, parapléjico y confinado a una silla de ruedas, será dado de alta la próxima semana del Hospital Jackson Memorial y comenzará a recibir tratamiento ambulatorio, según explicó a El Nuevo Herald uno de sus médicos.

Orlando Rodríguez, director asociado de Medicina Interna y Servicios Hospitalarios del Jackson, dijo el miércoles que la evolución del estado de salud de Sigler confirma que ha respondido favorablemente a la primera fase de rehabilitación.

‘Vamos a enviarlo a su casa el 26 de agosto pero con el objetivo de que regrese todos los días al hospital para que siga su tratamiento como hasta ahora’, indicó Rodríguez.

Sigler, líder del movimiento Opción Alternativa, llegó a Miami procedente de La Habana el 28 de julio e inmediatamente fue trasladado de urgencia al Jackson para que recibiera atención médica especializada.

‘Esta noticia es un buen síntoma’, manifestó Sigler poco después de confirmarse que no seguirá internado en el Jackson. ‘Me siento más aliviado porque estuve siete años en prisión y lo único que pude estar en la calle fueron cuatro meses. Creo que voy a sentirme más libre y seguro en familia’.

Sigler es uno de los 75 encarcelados hace siete años durante la llamada Primavera Negra, una ola de arrestos y juicios sumarios contra opositores pacíficos y periodistas independientes. En Cuba fue condenado a 20 años de prisión. Previamente rechazó una propuesta para ser atendido en España y seguir allí su rehabilitación.

Durante su encarcelamiento, Sigler contrajo una polineuropatía agresiva, la cual disminuye la sensibilidad en cualquier parte del cuerpo y requiere generalmente de un proceso de terapia intensivo.

Su liberación se produjo el 12 de junio en el marco de una ronda de conversaciones entre el gobernante Raúl Castro y la jerarquía de la Iglesia Católica cubana. En ese momento, 12 presos políticos terminaron siendo reubicados en cárceles cercanas a sus hogares. Posteriormente más de una veintena han viajado a España.

‘Salí de Cuba con unas 110 libras de peso, pero ahora sé que aumenté masa muscular. Prácticamente ya soy otra persona’, dijo Sigler.

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Autor: El Nuevo Herald