Cinco activistas cubanas continúan encarceladas: Aymara Nieto MuñozSissi Abascal ZamoraSayli Navarro ÁlvarezTania Echevarría Menéndez y Jacqueline Heredia Morales. Las cinco mujeres tienen algo en común: son miembros del movimiento Damas de Blanco, que este año cumplió dos décadas de creado.

El grupo opositor femenino ha sido blanco de represión por parte del régimen cubano debido a su labor pacífica desde su creación, en 2003. Según contó a CubaNet Berta Soler Fernández, líder del movimiento, este año han recordado dos fechas fundacionales: 30 de marzo y 22 de mayo.

La primera es conmemorada por las Damas de Blanco pues fue en ese tiempo que las esposas, madres e hijas de detenidos en la ola represiva conocida como “Primavera Negra de Cuba”, fueron por primera vez a la iglesia de Santa Rita, en Miramar, y se reunieron.

“El día 30 de marzo fue el primer domingo que llegamos a misa siete mujeres; lo decidimos en la antesala del cuartel general Villa Marista. Decidimos allí, en la visita, ir a esta iglesia de Santa Rita, que es la abogada de los casos imposibles”, recuerda Soler Fernández.

La opositora relató que antes de ese suceso ya existía en Cuba el Comité de Madres y Familiares Pro Amnistía “Leonor Pérez”, que “eran mujeres que se vestían de negro en invierno y en verano se ponían una blusa blanca, por ser familiares de presos políticos”. Fue el antecedente histórico inmediato de las Damas de Blanco.

“Nosotras nos íbamos a vestir de blanco, porque teníamos el dolor dentro y el blanco es paz, pureza; entonces íbamos vestidas de blanco con un detallito negro: una estola, una bufanda, un lacito”, describió la líder opositora.

“Luego comenzó a divulgarse que estábamos asistiendo y empezamos a unirnos; ya no éramos siete, éramos muchas más; de diferentes provincias comenzaron a venir a La Habana”, agregó.

La disidente cubana recordó también una segunda fecha: el 22 de mayo del 2003, que es cuando la periodista independiente María Elena Alpízar, exiliada actualmente en Miami, las “bautizó” con el nombre de Damas de Blanco.

Dos décadas de represión sistemática 

Soler Fernández hizo alusión a la constante represión que sufren muchas de las activistas del movimiento opositor, en muchas ocasiones solo por intentar llegar a misa cada domingo.

“Te detienen, lo mismo te pueden montar en una patrulla y llevarte a un lugar lejos de tu casa que cerca de donde te detienen. Te meten dentro del carro patrulla bajo el sol con todas las ventanillas cerradas (patrullas hornos), y al cabo de las cuatro o cinco horas te liberan, cuando ya terminó la misa”, contó la líder de las Damas de Blanco.

También a muchas de las activistas las llevan a los calabozos, donde los agentes de la Policía política las amenazan con dejarlas en prisión.

“Y aquí en La Habana, por ejemplo, en el caso de María Cristina Labrada o en el caso mío, nos están llevando para la unidad de la Policía con detenidos comunes. Nos tienen más de 15 horas allí y nos sueltan por la madrugada”, contó Soler Fernández.

La líder de las Damas de Blanco, con miembros en La Habana, Matanzas, Santa Clara, Holguín y Santiago de Cuba, también aseguró que llevan más de 60 domingos continuos que salen a las calles con la intención de llegar a misa, a pesar de que los agentes de la Seguridad del Estado las amenazan con llevarlas a prisión y acabar con el movimiento.

Precisamente, el exprisionero político de la Primavera Negra Ángel Moya Acosta manifestó que en 20 años el movimiento opositor femenino sigue presente “pese al acoso de la Seguridad del Estado; pese al esfuerzo y al gasto de recursos que hace la Seguridad del Estado con el objetivo de desmembrar a la organización, de desalentar a las que están y a las que muestran interés de pertenecer a las Damas de Blanco”.

Por su parte, Soler Fernández aclaró que las Damas de Blanco “van a seguir saliendo mientras exista un preso por motivos políticos; y van a seguir abogando por la libertad de los encarcelados.

“Por eso es que existimos y vamos a seguir existiendo. Mientras existan presos políticos van a existir Damas de Blanco exigiéndole, no pidiéndole, al régimen cubano, la libertad de todos los presos políticos, pero también la libertad del pueblo de Cuba”, aseguró finalmente la opositora.