Muere Laura Pollán, líder de las Damas de Blanco
Laura Pollán, líder del grupo disidente de las Damas de Blanco y uno de los rostros más conocidos de la causa por los presos políticos cubanos, falleció el viernes en La Habana tras una semana en estado muy grave por una insuficiencia respiratoria y descompensación diabética.
Pollán, de 63 años, sufrió en la tarde del 14 de octubre un paro cardiaco que no logró superar después de haber permanecido ingresada desde el día 7 en el hospital ‘Calixto García’ de la capital cubana.
Al parecer, la disidente cubana había contraído dengue de tipo cuatro que se combinó con otro virus identificado como ‘sincitial respiratorio’, que ataca principalmente a infantes, personas inmunodeprimidas y de la tercera edad.
Su cuadro se complicó por la diabetes crónica que padecía desde hacía años.
Sus restos serán velados esta noche en una funeraria de La Habana y posteriormente incinerados. Las cenizas de Pollán descansarán en Manzanillo, la localidad oriental cubana donde nació el 13 de febrero de 1948.
Miembros de la disidencia cubana se mostraron consternados por el fallecimiento de Pollán y destacaron su papel en la lucha por la libertad de los presos políticos cubanos.
‘Esta lucha va a continuar. Laura físicamente no está con nosotras pero espiritualmente sí’, dijo a Efe visiblemente emocionada Berta Soler, una de las Damas de Blanco más allegadas a Laura Pollán y portavoz del grupo.
‘Consternación. Dolor. Lágrimas’, ‘No para de llover, La Habana mojada y triste’ escribió este viernes en su cuenta de Twitter la famosa bloguera Yoani Sánchez.
Por su parte, el opositor y activista de derechos humanos Elizardo Sánchez subrayó la ‘batalla denodada’ que libró Pollán por la libertad de su esposo, Héctor Maseda, apostando incluso con su propia salud.
‘Comprometió su salud. Fue también víctima de maltratos físicos y psicológicos’, dijo a Efe Sánchez en alusión a los actos de hostigamiento que Pollán sufrió junto a sus compañeras por parte de grupos de seguidores del régimen cubano, el último de ellos el pasado 24 de abril.
Laura Pollán fue uno de los rostros más conocidos y respetados de la lucha pacífica por la causa de los presos políticos cubanos al frente de mujeres familiares de los 75 disidentes encarcelados en la Primavera Negra de 2003.
Profesora de literatura de enseñanza media, era esposa de Héctor Maseda, periodista independiente condenado a 20 años de cárcel en aquella ola represiva que provocó la creación de las Damas de Blanco, integrado por familiares del llamado Grupo de los 75.
Pollán fue una de las cofundadoras de ese grupo femenino, un singular movimiento de protesta pacífica en la isla que ha reclamado la libertad de los presos políticos con vigilias y marchas por céntricas avenidas de La Habana.
La imagen de las Damas de Blanco siempre vestidas de ese color como símbolo de paz e inocencia de sus familiares, portando gladiolos y formando con sus manos la ‘L’ de libertad se hizo internacionalmente famosa y fueron distinguidas con el Premio Sájarov del Parlamento europeo en 2005.
Pollán y sus compañeras fueron objeto de numerosos ‘actos de repudio’, eufemismo con el que se conoce en la isla el acoso y hostigamiento contra disidentes por parte de grupos de seguidores del régimen cubano.
En la primavera de 2010, en un ambiente marcado por la muerte del preso político Orlando Zapata tras una larga huelga de hambre, se intensificaron estos hostigamientos hasta el punto de que el cardenal Jaime Ortega, máxima autoridad católica en la isla, intercedió por ellas ante las autoridades cubanas.
Esa mediación culminó en una inédita reunión entre Ortega y el presidente Raúl Castro en mayo de 2010 que precedió al inicio de las excarcelaciones de los presos políticos del Grupo de los 75, un proceso apoyado por el Gobierno de España.
La excarcelación de todos estos opositores finalizó a principios de 2011: los últimos en salir de prisión fueron los que se negaban a ser liberados a condición de exiliarse en España, entre ellos Maseda, quien quedó liberado en febrero de este año.
Tras la liberación de los 75, las Damas de Blanco han continuado con sus protestas pacíficas para abogar por el respeto a los derechos humanos y la liberación de todos los presos políticos de la isla.
Autor: EFE